Yo soy un resto
de unas piernas
y unos brazos,
y no me queda tronco
donde asentar la cabeza.
Yo soy el náufrago
que se estrella cada noche
en esas playas de blanca arena.
Yo soy pedazos rotos de una esperanza.
La barca se hunde,
caemos a un inexplicable vacío
donde reina una tenebrosa oscuridad.
Yo soy el sol de rayos encendidos.
Del poemario 13 Náufragos
1 comentario:
Somos restos de un naufragio con esperanza de portar víveres para otros naúfragos de otros tiempos.
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