Letras tu revista literaria

sábado, 26 de agosto de 2006

La inmigración

No deberíamos de creer que el fenómeno es exclusivo de estos días. Porque la historia constata miles de movimientos de humanos a través de todos los tiempos. Los motivos pueden ser distintos pero que en nada se diferencian los de tiempos pasados con los de ahora.
El hombre en su condición de búsqueda ha protagonizado incursiones en todos los rincones del planeta en el que es, por supremacía, el rey todo poderoso. Pero al mismo tiempo es el simio insignificante que en su pretensión de estar por encima de todas las cosas se destruye a sí mismo y cómo no a sus congéneres.
¿No es la inmigración un reflejo de la inquietud de los humanos por superarse y por conseguir lo que otros poseen con los derechos y deberes de todo ciudadano, con el respeto y la libertad que a todos nos debería amparar y sin embargo nos desampara?
¿No son las democracias modernas las causantes de ese fenómeno al cerrar las fronteras y dividir el mundo en parcelas? ¿No es de todos merecido el derecho al tener una vida digna y vivir donde plazca siempre que se responda ante los deberes y derechos establecidos con respeto y libertad?
Los humanos en pos de riquezas producen infiernos inhabitables, ghettos, marginación y caos. Consideremos que la inmigración es sólo un efecto más de las sociedades modernas y que son éstas las que deben atajar, desde un punto de vista humano, tal fluido de seres en busca de una mejor calidad de vida y no olvidar jamás que ante todo debemos compartir las riquezas y erradicar la miseria que producen las sociedades desarrolladas.
Desde mi punto de vista la inmigración no es un problema, el problema está en la ineficacia de los gobiernos y por tanto en la pasividad de las democracias. El pueblo se mueve de un lugar a otro desde tiempos remotos e intenta asentarse en los lugares donde poder crecer y prosperar, cultural y económicamente.
¿Por qué los países mal definidos “libres” y “demócratas” cierran sus fronteras y sueltan los fantasmas de la xenofobia entre sus contribuyentes, en lugar de buscar solidarizarse con los países de origen de dichos inmigrantes para, en la medida de lo posible, atajar el fenómeno creando soluciones con sus gobiernos y haciendo que esos hombres, mujeres y niños tengan en su tierra de nacimiento lo que buscan en ese éxodo hacia la tierra prometida jugándose en muchos casos la vida?
Salvador Moreno Valencia
Escritor.
DNI. 25567962N
Fuengirola- 29640- Málaga
Tel. 652 470 813
Email: alvaeno33@hotmail.com

No hay comentarios: